En esta zona de mi web encontrarás información sobre algunas de las labores de investigación que he venido realizando, desde que terminé mi carrera de Ingeniería Industrial allá por 2002.

Como chico inquieto que era, me pareció buen momento para seguir formándome en temas que me interesaban: la informática, los robots, la mecánica… y en general todo lo que tuviera que ver con botones y lucecitas. Entonces tuve la oportunidad de incorporarme al por entonces Instituto de Automática Industrial del CSIC, hoy día integrado en el Centro de Automática y Robótica (CAR). Allí comencé mis primeros pasos en la investigación, financiado por una Beca FPI de la Comunidad de Madrid, y participando en toda clase de proyectos: desde los que tenían que ver con las máquinas tuneladoras, hasta la construcción de robots humanoides, pasando por el diseño de sistemas robotizados para la construcción naval. Hice todo tipo de cosas; desde el diseño y simulación mecánica con Pro/Engineer (cosa que me divertía mucho), hasta el desarrollo de sistemas de adquisición de datos y monitorización en QNX.

En 2005 me incorporé a la División de Ingeniería de Sistemas y Automática de la UPM (DISAM) para continuar mis investigaciones y embarcarme en el tema que daría como resultado mi Tesis Doctoral. Al llegar allí me encontré con un robot que no era capaz de modelar el interior del Museo de las Ciencias Príncipe Felipe de Valencia, que era uno de los partners de un proyecto que tenían en marcha. Así que a ello me puse y con casi tanta paciencia como ingenio ideé un sistema para modelar matemáticamente las paredes curvilíneas del interior del dichoso museo (¡gracias, Calatrava!).

Así, en 2009 finalicé mi Tesis Doctoral en el área de la robótica móvil. Con ella intenté aportar mi granito de arena a la solución de un problema de gran actualidad como es el SLAM (Simultaneous Localization and Mapping). Poco más tarde me incorporé a la Universidad Carlos III de Madrid, primero con un contrato postdoctoral, y más tarde como profesor visitante. Realicé trabajos con algoritmos genéticos y sobre todo di clases; muchas clases (cosa que me encantó). Abandoné aquel lugar antes de finalizar mi contrato, dándome cuenta de que la endogamia, el clientelismo y la competitividad, muchas veces insana, que en el ambiente universitario se respiran, no eran lo que yo quería en mi vida. ¡Por mucho que me siga gustando darle al coco y resolver problemas!

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