Vista… ¡caca!

Llueve sobre mojado para ese invento tan ‘chulo’ de Microsoft: su Güindous Vista, que tanto tiempo les llevó parir, y que les ha salido rana, ranísima, por no llamarlo un aborto. Se publica un artículo en BusinessWeek que sólo viene a confirmar lo que ya se sabía: a Vista le quieren en la empresa menos que al pobre Gizmo sus primos los Gremlins, y ahora es General Motors la que dice abierta y claramente: «Vista… ¡caca!«.

Aquí podéis leer el artículo, titulado «Closing the Door to Microsoft Vista» («Cerrando la puerta a Microsoft Vista»). Claro, sucede que los jefazos de GM se han dado cuenta de que Windows Vista requiere muchos recursos para funcionar ‘a tope’. Y para comenzar a utilizar semejante portento de la informática, se verían obligados a actualizar buena parte de sus PCs. En resumidas cuentas: demasiado tiempo y dinero para el provecho que le van a sacar. O, lo que es lo mismo, mucho larala para tan poco lerele. Así que desde GM ya han dicho que de momento van a pasar, y que de todas formas para cuando terminaran de actualizar sus equipos, ya estaría disponible Windows 7 (anunciado para dentro de dos o tres años), y que entonces ya estarían preparados para actualizarse (si es que entonces les conviene).

En realidad lo que está pasando, es que las empresas no saben cómo darles largas a los de Redmond para que no sean tan cansinos con su Vista, y les dejen un poquito tranquilos. Las industrias del software y del hardware siempre han ido tirando la una de la otra: el desarrollo de nuevos procesadores y arquitecturas permitían ensanchar un poco más las posibilidades que ofrecían las aplicaciones de escritorio, mientras que la aparición de nuevos sistemas operativos y aplicaciones que explotaban estas nuevas posibilidades, llevaban a los usuarios a actualizar sus equipos.

Aún recuerdo los días en los que estaba feliz y encantado de actualizar mi modesto 386 al sofisticado (por aquel entonces) 486. Y qué gozoso el día que jubilé este último, reemplazándolo por mi flamante Pentium… Entonces se le veía una utilidad, un beneficio, al hecho de mejorar el hardware para poder hacer cosas aún más alucinantes con tu PC. Hoy día nos encontramos con el paradójico hecho de que el hardware nunca ha sido tan barato y, sin embargo, nunca nos había dado tanta pereza ampliar la memoria, o mejorar el microprocesador. Lo único que nos interesa es ampliar el almacenamiento para que nos quepan más y más películas y música descargadas de internet…

Porque ahí es donde se encuentra la verdadera felicidad en el mundo tecnológico del S XXI: en la red de redes. En el mismo artículo de BusinessWeek se comenta cómo otras empresas, como Alaska Airlines, también se hacen las remolonas para subirse al carro del nuevo sistema operativo. Es que muchas de las cosas que hasta ahora sólo se podían hacer en el PC, ya se pueden hacer también ‘online’, a través del omnipresente navegador web.

¡Pues claro! Ahora sólo hace falta un computador medianamente decente, y una conexión a internet, para acceder a un mundo de posibilidades: procesamiento de texto, hojas de cálculo, e incluso retoque fotográfico están a una simple url de distancia… ¿Por qué actualizar el hardware, y someterse a la compra de nuevas licencias, cuando todo lo que necesitamos está disponible de manera gratuita a través de internet? Incluso el problema de almacenamiento comienza a resolverse de esta manera, gratis o pagando pequeñas cuotas…

En Microsoft ya se han dado cuenta, claro. ¡Ni que fueran tontos! Primero lo han intentado con Yahoo!, y ahora parece que le quieren tirar los tejos a Facebook. La gran guerra ya no se vive más en los escritorios. El campo de batalla ahora es muchísimo más amplio, y las batallas se libran en red. Puede que en Microsoft hayan reaccionado demasiado tarde: el pastel está ya muy repartido, y su presencia en internet no se corresponde con el gigante que ha sido. Muchas cosas se han movido en los últimos años, y papá Gates y tito Ballmer parecían más ocupados en ponerle un perrito a su buscador, y un clip dando el coñazo en Office.

Ahora parece que abrirse paso en el incipiente negocio de internet sólo será posible armando la bronca y a golpe de talonario (métodos que no son desconocidos para Microsoft). En cualquier caso, la idea del PC como ‘caja de las maravillas’ está cambiando, para dar lugar a la de ‘puerta al mundo de las maravillas’. Y lo que parece seguro es que este batacazo que se ha pegado Microsoft con su último hijo es mucho más que un mero tropezón: presagia el final de una era, y recuerda a los últimos esfuerzos de un ‘Último Mohicano‘ que lucha desesperadamente por que no terminen unos tiempos dorados, que se han ido para no volver.