Me ha encantado el siguiente vídeo de Ecotricity, en el que animan a la población británica a construir un país «más verde»… por supuesto pasándose a su compañía. Realmente bonito.
Ecotricity es una compañía británica especializada en la producción de energía eólica. La empresa fue fundada en 1995 por Dale Vince, un antiguo hippie trotamundos reconvertido en empresario verde. Están inmersos en una agresiva política expansiva, con una fuerte reinversión de sus beneficios en la construcción de nuevos parques eólicos. En esta entrevista Dale Vince nos explica su visión del mercado energético, y sus propósitos empresariales. Sólo verle representa un cambio de paradigma en cuanto a lo que esperamos encontrarnos en el presidente de una compañía eléctrica.
La empresa de Mr. Vince está sabiendo explotar muy bien las crecientes protestas de consumidores que desde hace algunos meses azotan a las «Seis Grandes» (npower, SSE, e.on, British Gas, EDF Energy, y Scottish Power, esta última del grupo Iberdrola). Las «Big Six» están siendo acusadas de llevar políticas de precios poco éticas, sistemas de tarificación demasiado complejos y de ofrecer una pésima atención al cliente.
Con esta campaña, «Dump the Big Six», Ecotricity parece querer aprovechar toda esa rabia acumulada entre la opinión pública contra las Seis Grandes y tornarla en su propio beneficio, mostrando al mismo tiempo las ventajas de un Reino Unido más ecológico y energéticamente independiente. Su lema:«¿Estás harto? Cámbiate a Ecotricity». Bien hecho.
Parece —o al menos así lo percibe la opinión pública— como si algunas grandes compañías energéticas, al igual que sucede con sus parientes del sector creativo, tuvieran un problema de parálisis no sabiéndose adaptar a los nuevos tiempos, y pretendieran extender en el tiempo sus monopolios aún a costa del propio consumidor. Peor aún, pudiera parecer que activamente intentan retrasar la llegada de esos nuevos tiempos no invirtiendo lo suficiente en nuevas infraestructuras —al menos esta es otra de las quejas que contra ellas se levantan—.
Bien mirado el sector energético está experimentando una evolución pareja a la del sector de los contenidos. Si en el último caso la producción, transmisión y consumo de la cultura se ha deslocalizado y democratizado gracias a la penetración en el sector de Internet y los nuevos formatos digitales, en el primero cada vez es más viable que ciertas comunidades produzcan sus propios recursos energéticos, o que estos sean suministrados por nuevas compañías de pequeño tamaño. Los procesos de liberalización del sector energético, los nuevos sistemas de producción energética basados en fuentes renovables, los nuevos modelos deslocalizados, el propio incremento de los precios, o la mayor formación tecnológica de los consumidores y el acceso a la información pueden hacer temblar los pilares de las grandes empresas del sector.
Si bien es cierto que son muchos quienes aún apuestan por las grandes fusiones, y la construcción de grandes grupos empresariales en el sector energético —que es la tendencia de facto, en este y otros muchos sectores—, lo cierto es que cada vez es más real y cercana la frase «genera tu propia energía». Dale Vince es un ejemplo viviente de ello; comenzó su negocio cuando satisfacía sus propias necesidades energéticas con una única turbina eólica. Entonces vivía en un camión aparcado en una colina cerca de Stroud, en Gloucestershire. En poco más de 15 años ha levantado una compañía que planta cara a las más fuertes. Todo un ejemplo.
ANA
Es muy interesante ejemplos como éste, Luis. Ya apuntaba A. Lafuente a la estrecha conexión entre los entornos digital y ecológico en el procomún.
Ambos creo que están transformando lo que somos…