Leía hace unos días este artículo de Bernardo Hernández en CincoDías.com, que comenta de qué manera la actividad publicitaria se ha tenido que adaptar a marchas forzadas a las nuevas posibilidades que permite un medio como es internet (también está disponible en uno de los blogs del autor). Está claro que las nuevas tecnologías que han ido emergiendo desde anteayer, como quien dice, han provocado un ‘giro copernicano’ en la publicidad tal y como se venía entendiendo. Y las posibilidades que ofrece la red de redes, aún no han comenzado a explotarse a fondo, como ya apuntaba en este post.
¡Qué atractivo es internet como soporte publicitario! Hernández señala estas cuatro características que la hacen única:
- Segmentar granularmente la audiencia
- Pagar sólo por resultados
- Controlar en tiempo real las campañas, activando y desactivando según sea necesario y
- Accesibilidad desde presupuestos muy bajos
Y ahora voy yo y añado:
- Internet ofrece la posibilidad de comprar en el acto, o incluso de contratar en el acto.
Lo de comprar es obvio. ¿Quién no ha comprando alguna vez algo en internet? Vale, seguramente mucha gente aún. Pero ¿quién no ha oído hablar de amazon o eBay? El comercio en internet es una realidad que a muchos ya no nos resulta algo extraña o arriesgada. Comprar o vender productos está ya al alcance del ratón de cualquiera.
Lo de contratar viene porque precisamente la semana pasada asistí a una charla organizada por suscipe.net, en la que David Blanco nos habló de la empresa que ha fundado: Tractis. Se trata de una empresa que ofrece la posibilidad de crear, negociar y firmar contratos 100% online y que éstos tengan plena validez legal en el mundo offline.
David Blanco es muy joven, pero también muy inteligente y con las ideas increíblemente claras. Hacía muchos años que andaba dándole vueltas a cómo mejorar las condiciones de seguridad en las transacciones comerciales en internet. Pero recientemente, con la rápida expansión por toda europa de las identificaciones electrónicas (o electronic IDs) se dio cuenta de que había una oportunidad de negocio muy apetecible. ¿Qué tal si cualquier empresario o particular, sin moverse de su despacho o domicilio, pudiera contratar cualquier servicio, o firmar cualquier tipo de contrato? Si todos los procesos de negociación se realizan ya en su mayor parte aprovechando los mecanismos que proporciona internet, ¿por qué interrumpir el flujo natural, introduciendo engorrosos papeles enviados por correo y analógicas firmas a mano? Y todo ello aprovechando, por ejemplo, el DNI electrónico que se está esparciendo en países como España a la velocidad del rayo.
Parece que de momento la cosa les va bien. Tractis ha sido elegida Web Revelación de 2007 por Yahoo! Iberia, y es considerada por la revista Business 2.0 como una de las 31 start-ups más prometedoras a nivel internacional (aquí podéis leer un artículo en inglés sobre ellos). Ahora mismo suena un poco a chino esto de firmar algo sin salir de tu casa, sin más que introducir tu tarjeta en un nuevo tipo de lector conectado a tu PC; pero lo mismo pensábamos muchos hace no tanto de eso de ‘comprar por internet’. Posiblemente el hecho de necesitar un lector especial sea uno de los principales impedimentos iniciales para la popularización de este nuevo sistema de contratación; por eso desde Tractis ya se encargan de ofrecérnoslo, y el propio Blanco señala que en breve muchas entidades bancarias se encargarán de regalarnos uno al abrir una cuenta en sus oficinas. Parece que es cosa de tiempo que el invento de esta gente cuaje y se popularice. De momento ya han anunciado su primer cliente: Caixa Galicia permitirá que sus clientes firmen contratos 100% online utilizando algo tan sencillo como es el DNI electrónico. Cosa de brujas hace tan sólo unos años.
Tras la intervención de David Blanco, le tocó el turno a Ángel Iglesias, fundador y presidente de Ikusi, una empresa de tecnología electrónica industrial, con más de 700 empleados y presencia en 5 continentes. Este hombre, que comenzó con 12 años trabajando en un taller de bicicletas, y que continuó reparando planchas a domicilio, a sus más de 70 años no ha perdido la ilusión por crecer y acometer nuevos retos (aquí podéis leer una pequeña biografía suya). Iglesias dijo algo importante: el empresario debe estar continuamente preguntándose en qué puede mejorar la vida de sus clientes. El éxito está en desarrollar productos y servicios que se ajusten a las necesidades que en cada momento tenga tu sociedad, y en preguntarte no en qué puedes beneficiarte tú de la sociedad, sino en qué puedes ayudarla.
Y aquí vuelvo al comienzo del post. Internet ofrece la posibilidad, como nunca antes habíamos soñado, de conocer a la gente. Gustos, aficiones, hábitos, relaciones e intereses de las personas quedan reflejados en perfiles de facebook, anotaciones en blogs, ‘gorjeos’ en twitter y comentarios en foros varios. Cada uno dejamos nuestro particular rastro por la red, y sólo falta que las grandes empresas (y no tan grandes, ya que internet todo lo aplana) se aprovechen de las nuevas posibilidades que ofrece el adecuado tratamiento de esta información.
De modo que el pastel está servido y alguien tendrá que partir el primer trozo. Como Bernardo Hernández dice al final de su artículo…¿Quién se atreve?
Anonymous
Interesante punto de vista. Aportas mucho tío. Muy documentado, bien enlazado y bien escrito. Me ha encantado tu blog.